AG 2025 - Carta final a los pradocios

Queridos hermanos Pradosianos :

Con gran alegría y esperanza queremos compartir con vosotros lo vivido en Limonest (Lyon) durante la celebración de la Asamblea General de nuestro instituto. Han pasado seis años desde la Asamblea General de 2019. Seis años de trabajo y fidelidad a nuestra vocación pradosiana y a nuestras iglesias locales.

Una vez más, nos reunimos en la Junta General convocada por el Director General Armando Pasqualotto y su Consejo del martes 1 de julio al martes 15 de julio, sobre el tema "Puesto que el Espíritu nos da la vida, déjate guiar por el Espíritu"(Gal 5,25). Damos gracias a Dios por los servicios que han prestado a lo largo de los años y por su labor de proclamación del Evangelio a los pobres.

Éramos sesenta personas de 20 países, en representación de todo el Instituto a nivel mundial. Desde el primer día, se nos presentó un ambiente de oración, fraternidad y escucha de lo que el Espíritu Santo pudiera sugerirnos en este momento histórico para nuestro Prado, nuestras iglesias y nuestro mundo marcado por la pobreza, la guerra, los abusos, la falta de sentido, la secularización, la interculturalidad, la escucha del grito de la tierra y muchos desafíos.

Hemos sabido escucharnos e interpelarnos con espíritu sinodal, buscando siempre la mejor manera de vivir como Pradosianos bajo la guía del Beato Antoine Chevrier. "Conocer a Jesucristo y darlo a conocer lo es todo" (VD 113, 225, 103; cf. Cartas 105, 129), es siempre nuestra primera tarea. Condiciona todo lo que vivimos y hacemos (cf. Flp 3, 8-11).

Si bien es cierto que la primera tarea de nuestra asamblea es la elección del Responsable General y su consejo, no descuidamos el conocimiento de nuestra vida como sacerdotes y laicos consagrados del Prado en el mundo ni los diversos desafíos que nos esperan en los próximos seis años.

Con este propósito, guiados por la oración, el estudio del Evangelio y la fuerza del Espíritu Santo, hemos elegido como Director General a Diego Martín Peñas, quien, junto con sus colaboradores y el Consejo General, nos guiará en los próximos años.

El Señor Jesús prometió, antes de ir a la derecha del Padre, que nunca nos dejaría solos y que el Espíritu de la verdad que nos enviaría nos enseñaría poco a poco a conocer toda la verdad y las cosas futuras (cf. Jn 14,26; 16,13). Con este espíritu de verdad, una celebración de "reparación espiritual" por los abusos de autoridad, de poder y las agresiones sexuales concluyó un largo período de trabajo sobre este tema.

Para definir las recomendaciones a tener en cuenta en los próximos años, hemos formado seis grupos de trabajo sobre la Economía de nuestro Instituto; la Colaboración entre los distintos continentes; la necesidad de dar a conocer el carisma del Prado (Pastoral Vocacional); la Formación de sacerdotes y formadores (formación primera, seminario); la Formación de discípulos misioneros (laicos, catequistas, etc.); la Comunicación; y la Actualización del carisma del Prado ante los nuevos retos y, por último, la Familia espiritual (Chemin d'Alliance, Limonest).

Escuchar y conocer a toda la Familia Espiritual del Prado (sacerdotes y laicos consagrados del Prado; Instituto Femenino del Prado, Hermanas del Prado, Laicos Asociados, Diáconos y sus cónyuges y "Prado Educación" en Francia), cuya presentación suscitó un gran interés antes de la celebración de la Eucaristía en presencia del Arzobispo de Lyon, Mons. Olivier de Germay.

Una Asamblea no puede resolverlo todo, del mismo modo que un Consejo del Prado no puede gestionarlo todo sin la ayuda del resto de los pradosianos. Esta es la gran tarea de los seis años que tenemos por delante.

Diego Martín Peñas y la Junta General Anual